Sigue la historia de Lucho Buenaventura (Furriel), quien después de invertir todos sus ahorros para viajar con su hijo al Mundial, ve cómo la Selección Argentina de Fútbol queda descalificada por una sanción en la etapa de eliminatorias. Sin nada más por perder, reúne a sus compañeros de trabajo, un llamativo grupo de fracasados a punto de quedarse sin empleo, para hacer justicia por mano propia. ¿El plan? Robar la Copa del Mundo en su gira promocional por Argentina, para intentar la reincorporación al Mundial y así salvar la ilusión de su hijo y el honor de un país.