La serie empieza con la llegada pacífica a la Tierra (concretamente, a unos idílicos Los Ángeles de comienzos de los noventa) de una raza alienígena de inmigrantes físicamente muy similares a los seres humanos. En ella se muestran los problemas morales y de convivencia propios de la relación entre humanos y extraterrestres desde un punto de vista propio del drama policial: la discriminación, los asesinatos y vicios y las relaciones entre especies serán la base de cada episodio.